Este volcán tiene la altura de 1,493 metros S. N.M. y se lleva 1 hora y 30 minutos para llegar hasta su cráter. En este cráter hay una laguna, con una extensión de 0.6 kilómetros cuadrados, con un agua muy clara, que con el entorno realza su belleza.
Foto de la Laguna en el cráter del Volcán Ipala
Con 33 volcanes de los cuáles 3 están activos, Guatemala proporciona al visitante una inolvidable experiencia, capaz de impresionar a cualquier persona. Así pasó con los jóvenes que fueron con nosotros, pues pudieron contemplar la belleza y realeza de la madre naturaleza.
Otra foto de la lagunaLos jóvenes salieron de sus casas a las 05:00 am. Pastor Miguel Torneire, en el carro de la iglesia pasó recogiendo a todos los jóvenes en sus casas, luego partimos rumbo al Volcán Ipala, un viaje de 1 hora y 3 minutos, desde Zacapa.
En el municipio de San José La Arada, a las 06 de la mañana, paramos para hacer nuestro desayuno en un comedor, donde nos sirvieron un típico desayuno “chapin” (la palabra “chapin” para quien no conoce, es lo mismo que guatemalteco. O sea, todos los guatemaltecos son chapines.), con huevos revueltos, tortilla, café con leche, frijoles, queso y crema. Después del desayuno seguimos el camino.
Ya en la carretera de nuevo, rápidamente llegamos en la entrada de la ciudad de Ipala. En Ipala pedimos información de cómo llegar al volcán. Nos informaron que deberíamos salir de la ciudad e ir rumbo a Jutiapa, otro municipio de Chiquimula, que en el camino encontraríamos una señal indicando el camino.
El encontrar la entrada, sacamos una foto de nosotros, donde dejamos el carro parqueado, antes de empezar a subir. Sabíamos que nos esperaba una caminada de 1 hora y 30 minutos hasta el cráter del volcán.
Al llegar al cráter, un área protegida, nos recibieron dos guardias forestales, que muy amablemente nos explicaron algunas reglas que deberíamos seguir, además de explicar lo que podríamos hacer para aprovechar bien nuestro paseo.
Luego fuimos a buscar nuestro almuerzo. Informado por los guardias que las familias que viven cerca del cráter, hacían ricos caldos de gallina criolla, pero que deberíamos hablar con ellos con un cierto tiempo de anticipación, reservamos nuestro almuerzo para poder seguir disfrutando del bello lugar.
Después que el almuerzo esta garantizado, fuimos a ver la laguna de cerca. Algo muy bello e impresionante. Al estar cerca uno se pregunta: ¿Cómo pudo haber nacido una laguna donde antes hubo fuego? Estuvimos un ratito, después empezamos a caminar.
Todos nosotros a la orilla de la laguna
Fuimos al sendero creativo que había. Este sendero nos llevó a un mirador, donde podíamos ver todo el lago con una visión privilegiada. Todos contemplaron la belleza del lugar y pudieron percibir que solamente un Dios Todopoderoso podría haber hecho algo así.
Seguimos caminando en el sendero hasta llegar a un lugar que nombraron de: Viajeros del cielo. Tiene este nombre por los muchos pájaros que tienen la reserva. Luego llegamos a un lugar donde había árboles adultos y muy grandes. Todavía pudimos percibir que la naturaleza en este lugar esta siendo preservada.
Otro lugar en el sendero que buscábamos era una cueva llamada: la cueva de la leona. Tiene este nombre porque muy antiguamente se dice que una leona tuvo sus pichones ahí. Aprovechamos la oportunidad para subir y mirarla.
Después seguimos el sendero, que nos llevó muy cerca de la orilla de la laguna de nuevo, donde pudimos ver muy de cerca algunas plantas acuáticas que había. Al verlas, descasamos un ratito y esperamos el horario del almuerzo en lugar que hicieron para conferencias, camping, almuerzos, etc.
Foto de las plantas acuáticas y del camping
Luego fuimos almorzar. La gallina y las tortillas ya estaban prontas. En este día comimos un rico “caldo de gallina” criolla. Comimos tanto, que ni para los perros sobró, ya que cominos todo.
Foto de nosotros ante nuestro almuerzo (ahora el después)
Al almorzar, regresamos al camping, donde descansaos un ratito más, pues estábamos rellenos. Algunos aprovecharon para sacar siesta, otros aprovecharon para seguir caminando y aprovechar la bellaza natural del lugar.
Después que descansamos, nos despedimos de los guardias y regresamos a nuestros hogares. Sabíamos que nos esperaba una bajada muy inclinada y todavía un viaje de 1 hora hasta Zacapa.
Uno de los muchos paisajes del lugarAgradecemos a Dios por tan precioso regalos a todos nosotros, además de la linda naturaleza. También agradecemos a los jóvenes que participaron, pues pudimos conocernos más, fortalecer nuestra comunión, compañerismos y amistad.
“Joven, alégrate en tu juventud, y tome placer tu corazón en los días de tu adolescencia, pero también, acuérdate de tu Creador en los días de tu juventud” (Eclesiastés 11.9; 12.1).
2 comentarios:
Se ve que la pasaron muy bien! Muy bonitas fotos, precioso lugar...espero algun dia visitarlo! y tambien espero acompañarles a los jovenes en alguna actividad para finales de este año, que es cuando estare de nuevo visitandoles por la iglesia.
Saludos a todos.
Ola, Miguel!
Sempre e bom acompanhar seu trabalho.Sua alegria e entusiasmo na obra do Senhor sao contagiantes!
Saudade dos bons tempos de Concordia mas a vida tem que andar pra frente e aqui na Inglaterra estamos nos e ai na America Central esta vc. Todos engajados na mesma tarefa: levar Cristo a todos.
Um grande abraço dos Bessel
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