Debido a sus vínculos familiares en Zacapa, ella fue traída a esta ciudad, donde fue velada y enterrada, dejando enlutados – Luís Mazariegos, Estuardo Mazariegos, Mara Mazariegos y Maria Ester Mazariegos (todos sus hermanos), además de parientes, sobrinos y amigos.
El cuerpo de Sandra llegó a Zacapa el día 12, a las 19:00 horas (aproximadamente). Pastor Gerardo Vásquez acompañó a la familia con un servicio en la casa donde ella fue velada. Muchos parientes, amigos y hermanos en la fe de Sandra estuvieron presentes. Muchos de ellos pasaron toda la noche velando y apoyando a la familia enlutada.
Pastor Gerardo dirigiendo el servicio en la casa de los parientes de Sandra
El día 13 a las 15:00 horas, realizamos un servicio fúnebre en la Iglesia Luterana “El Divino Salvador” de Zacapa. En este servicio, pastor Miguel Torneire fue el liturgo y predicador. Luego, a las 16:00 horas, fuimos al Cementerio Municipal de Zacapa, donde hicimos el sepelio propiamente dicho y las consideraciones finales.
Después de las palabras del pastor, algunos parientes de Sandra, así como amigos de la Universidad San Carlos de Guatemala y hermanos en la fe de la Iglesia Luterana “Cristo Rey” hicieron uso de la palabra y también expresaron su dolor y agradecimiento por la amiga que tuvieron.
Por la fe que expresó Sandra aun en vida, tenemos la plena seguridad y certeza de que esta hermana está ahora en los brazos de Jesús, gozando de la vida eterna. Sandra por muchos años luchó con la muerte, pues luchó con el cáncer por mucho tiempo, pero Dios decidió llevarla para que no sufriera más.
“Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá” (Jn 11.25). Sandra físicamente está muerta, pero espiritualmente está gozando de los regalos de la vida eterna en el cielo, junto de Jesús y de todos los santos que murieron creyendo en Jesús.
Les suplico que oren por la familia enlutada, para que Dios los fortalezca y consuele con su poder y gracia. A los enlutados dedicamos estas palabras: “¿Dónde está, muerte, tu aguijón? ¿Dónde, sepulcro, tu victoria?, porque el aguijó de la muerte es el pecado, y el poder del pecado es la ley. Pero gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo” (1 Co 15.55, 56).
1 comentario:
Nuestros mas sentido pesame a la familia Mazariegos.
Como cristianos sabemos que ella esta
delante del trono celestial alabando con todos los santos el nombre del Cordero.
Job 19:23-27
Familia Graham
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