"Abuelitos" y Damas participado del servicio en el asilo.En un primer momento, tuvimos la dicha de oír y estudiar la Palabra de Dios, pregonadas por pastor Miguel. Él habló del amor de Dios hacia nosotros, que fue demostrado a través de su Hijo Jesús. Es más, porque Dios es el autor de este amor (Cf. 1 Jn 4.7), somos capaces de amar también, pues Él ha derramado este amor en nuestros corazones (Cf. Ro 5.5). Si hoy amamos, fue porque Cristo no amó primero (1 Jn 4.19) y demostramos este amor en servicio al prójimo.
Pator Miguel predicando.En esta visita, las Damas llevaron los víveres que juntamos en la Campaña de la Libra en nuestra congregación y los dejamos para que sean consumidos por los “abuelitos”.
Todas las Damas que visitaron al asilo de ancianos. Sobre la mesa están los víveres, regalos y refacción.También las Damas llevaron unos regalitos para cada anciano y lo repartieron entre ellos. Fue una bendición, pues tuvimos la dicha de ver en la sonrisa de ellos el agradecimiento por los regalos recibidos.
Damas distribuyendo los regalos.
Después del regalo, distribuimos también unos “tamalitos” (comida típica de Guatemala), un pastelito y aguas gaseosas. Todos recibieron con alegría lo que preparamos y lo hicimos movidos por el amor de Cristo. Muchas veces hablamos del amor de Dios, pero no lo demostramos. Esta fue una excelente oportunidad que tuvimos para demostrarlo. Que Dios bendiga a todas las damas por este acto de amor tan lindo.
"Abuelitos" saboreando la rica refacción distribuida por las Damas de la Iglesia.
"Me enseñaste, Dios, desde mi juventud, y hasta ahora he manifesado tus maravillas. Aun en la vejez y las canas, Dios, no me desampares, hasta que anuncie tu poder a la posteridad, tu potencia a todos los que han de venir, y tu justicia, Dios, que llega hasta lo excelso" (Sal 71.18,19)
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